¿Por qué es importante que los niños puedan jugar?
El juego es fundamental para el desarrollo de los niños, ya que está vinculado con la educación de la afectividad y la preparación para lograr objetivos en la vida. Puede ser recreativo o educativo, permitiendo a los niños imitar, imaginar, explorar y desarrollar habilidades cognitivas y socioemocionales. Los juegos pueden ser desestructurados, sin reglas específicas, o estructurados, con objetivos definidos y reglas aceptadas. Los padres deben fomentar juegos estructurados que promuevan el respeto a las normas, la resolución de problemas y el aprendizaje de cómo enfrentar los desafíos de la vida. A través del juego, se pueden desarrollar habilidades físicas, sociales e intelectuales, preparando a los niños para alcanzar metas y enfrentar retos en su vida.